“La iniciativa surge por los diferentes problemas que se habían presentado al interior del colegio, que tenían que ver, principalmente, por peleas, irrupciones, entre otras. Existía una falta de normalización de las conductas de los jóvenes, así que tomamos la decisión de desarrollar talleres a nivel general, con unidades transversales, con la idea de lograr una convivencia sana, en base al buen trato”, relató Alejandro Higuera, Encargado de Convivencia Escolar e Inspectoría General del Liceo Industrial de San Miguel Agustín Edwards Ross.

El objetivo principal de estos talleres es que los estudiantes trabajen junto a sus profesores en las salas de clases y desarrollen actividades a partir de las emociones.

“Un equipo de profesores creó una serie de talleres que fueran atingentes a los estudiantes, desarrollaron el material y lo pusieron a disposición de los profesores jefes. Estas actividades se realizan al mismo tiempo en distintas salas de clases y son muy prácticos”, agregó Alejandro Higuera.

Los primeros talleres que apuntaban al plan de convivencia escolar, llevaban por nombre, “reconociendo emociones”, “el árbol de la convivencia”, “emoción, acción positiva, buena convivencia” y “creando nuestros tres compromisos para una buena convivencia”.

Tras el éxito de estas iniciativas y, luego de un análisis realizado por el equipo directivo, pudieron evidenciar que los estudiantes necesitan liberar energías y trabajar en equipo, con objetivos y metas concretas.

“Los talleres de Mosaico, Música, Fútbol, Básquetbol, Robótica, Ping-Pong, Artes Marciales, Rap, Vóleibol, Taller de Género, PAES Lenguaje y PAES Matemática, son la continuación de las primeras actividades, y éstos están desarrollados con monitores específicos, algunos internos y otros externos. Hemos percibido que los alumnos estaban muy interesados en compartir lo que les estaba pasando, la reacción ha sido muy positiva y han sido súper participativos. La verdad es que estos talleres, unido a todas las acciones que hemos realizado, ha mejorado considerablemente la convivencia escolar en nuestro Liceo”, finalizó Alejandro Higuera.